Calaverita literaria a la Superintendente de escuelas públicas de Seattle.

Enviado al Concurso de Calaveras literarias de WAGRO, 2019. No ganó premio o reconocimiento. Dos años más tarde la superintendente se fue sin pena ni gloria, con el contrato no renovado.

A la Juneau en Seattle
 le encanta la pelea,
 armada de ideología
 hasta a los niños matonea.

 Pone padres contra padres,
 dividiendo más el distrito,
 gusta saltarse las reglas,
 dice no al diálogo y sí al grito.

 Pobre superintendente
 creyó que iba a ligas mayores,
 pero la agarró un infarto,
 terminó donde los pecadores.

 Don diablo le dijo cariño
 acá tendrás larga estancia,
 un año por cada niño 
 que condenaste a la ignorancia.

 Está el camino al infierno
 empedrado con tus intenciones,
 te trajeron acá tus palabras
 pero también malas acciones.

 A los maestros regalaste
 promesas hechas de viento,
 mataste mentes brillantes,
 solo para obtener un aumento.

Calavera de la abuelita

Co-Ganadora Segundo Lugar Calaveritas Nacionales Concurso WAGRO 2020.

 Hoy me llaman "esencial",
 pero el voto me lo niegan.
 "Trabajador ideal",
 y con la migra me friegan.

 La enfermera, inmigrante ella,
 el teléfono habilita.
 Hoy vi morir en pantalla,
 digo adios a mi abuelita.

 Calaca, te la llevaste,
 sin que viera a su bisnieta.
 El corazón nos quebraste,
 dejando mi mente inquieta.

 ¿Por qué muerte te me llevas
 a mi abuela que era buena?
 Habiendo mil sobalevas,
 ricachones, y sin pena.